Lamentamos el sensible fallecimiento del profesor, investigador y filósofo Carlos Lenkersdorf.

Carlos Lenkersdorf nació en 1926 en Alemania pero llega a México hacia 1957. En nuestro país hizo sus estudios en filosofía y se dedicó a la docencia. En 1973, como él mismo lo decía, abandonó las aulas para ir a vivir y aprender de las comunidades indígenas tojolabales de Chiapas. Ahí es testigo de una forma de organización y convivencia social que lo marca de por vida. Carlos Lenkersdorf aprendió la lengua, la cultura y la visión del mundo de los maya-tojolabales, que lo llevan a cuestionar críticamente los cimientos del eurocentrismo así como el racismo imperante en la academia y en la sociedad occidental.
La labor de Carlos fue inmensa, nos legó libros en donde encontramos una forma de filosofar desde una perspectiva no occidental, sino desde una perspectiva más incluyente. La filosofía maya-tojolabal, basada en un principio nosótrico, se presenta como una alternativa a la tradición filosófica de occidente regida por un acérrimo eurocentrismo, que por lo mismo ha fracasado en sus planteamientos al dejar fuera a una diversidad de formas de pensar.
Esta filosofía que nos compartió Carlos hasta el final de su vida, se nos presenta también como una alternativa a un contexto social como el presente, donde los principios y los valores de la sociedad parecen olvidados. Nuestra crisis de organización, de diálogo y de solidaridad del uno con el otro pueden hallar luces en las enseñanzas de un pueblo que nos interpela desde lo más profundo de nuestra cultura.
Hoy nos dolemos con la pérdida de uno de nuestros filósofos más queridos, pero lo recordamos con sus obras, estudiándolo. Compartimos con ustedes este texto que resulta revelador sobre las líneas en que se mueve la filosofía tojolabal, a la que Carlos Lenkersdorf le dedicó la mayor parte de su existencia: La vida de la palabra hermano en un pueblo donde todos lo son.
“una sociedad de hermanos y hermanas, una sociedad desestatificada en la cual nos encontramos y vivimos como iguales que nos respetamos mutuamente. No se trata de una sociedad utópica sino de hoy en día, contemporánea nuestra aunque, en gran parte, militarizada por un ejército de ocupación, porque a todo parecer el gobierno no tiene confianza en tal sociedad que, además, puede autogobernarse dentro de la nación mexicana. Los tojolabales nos presentan, pues, una realidad muy alejada de lo que se vive en la sociedad dominante, tanto en México como en otros países de Occidente… Seguir leyendo.
Círculo de Estudios de Filosofía Mexicana
Hola, no sabía de la existencia de esa universidad ni que le hubiera dado un Honoris Causa a Lenkersdorf, agradecería cualquier información al respecto, sobre todo por el comentario de que es una universidad que discrimina a los indigenas. Un saludo.
Doctor Honoris Causa por la UIEM –universidad donde los indígenas son discriminados por los nietos de hacendados, primos y sobrinas de Peña Nieto, y recomendados de politiquillos, que se posesionaron de un proyecto propuesto hace 30 años por el movimiento indígena mazahua.
En parte la culpa la tiene la UNAM por quitarle parte del dinero que a él le correspondía para sus quimioterapias, otra parte la tienen los alumnos de la FFyL pues se estaba organizando una tipo junta para ir a protestar a las autoridades y cuando se empezaba a tener vigor muchos se hecharon para atrás. En fin, en México todavía se ve que nuestra educación esta inmersa en un racismo espantoso. ¿Hasta cuando?